Juegos de la saga Breath of Fire

Saga de JRPG creados por Capcom y publicados por Squaresoft en principio para la consola SNES y lanzado por primera vez en Japón el abril de 1993. Fue lanzado en Norteamérica al año siguiente por Squaresoft. Capcom reconoce que Breath of Fire es su primer videojuego de rol. Más tarde, en 2001, el videojuego fue lanzado para una nueva plataforma, la Game Boy Advance, con algunas mejoras en el sistema de guardado y los gráficos, y su traducción al inglés fue estrenada por primera vez en Europa.

El videojuego está ambientado en un mundo fantástico y trata sobre los viajes de un chico llamado Ryu en la búsqueda de su hermana por todo el mundo, siendo capaz de transformarse en un poderoso dragón gracias a su ascendencia. Durante su busca, encontrará por el camino a otros guerreros y entrará en conflicto con el Clan de los Dragones de la Oscuridad, quienes ansían controlar el mundo resucitando a una deidad maligna.

Historia

A principios de los años 90, la compañía japonesa Capcom tenía un gran éxito de crítica y público con múltiples juegos en diferentes plataformas, especialmente en las consolas de Nintendo con sagas como Street Fighter o Ghost´n Goblins entre otras, y querían replicar el éxito de las sagas de juegos más conocidas y famosas de la época, Final Fantasy y Dragon Quest, y lanzar al mercado sus propios juegos de rol de estilo japonés (JRPG). Así que se pusieron manos a la obra y comenzaron el desarrollo de su propio juego que finalmente se convertiría en una saga de, al menos hasta el momento, seis juegos lanzados al mercado para diferentes plataformas, especialmente en las consolas de Nintendo (los dos primeros) y Sony (los tres siguientes), además de otras apariciones en otras plataformas como los juegos de cartas Teppen. Todos los juegos tienen como protagonista a un personaje del Clan Dragón de la Luz llamado Ryu, y una mujer del Clan Alado llamada Nina, y aunque todos ellos guardan gran similitud entre sí, todos ellos están ubicados en épocas diferentes, son descendientes de sus respectivos clanes en momentos distintos, y tienen características también diferentes (similar a Link en The Legend of Zelda). Aún así, los cuatro primeros juegos se consideran como continuaciones entre sí por la propia Capcom, aunque se pueden entenderse como juegos independientes por ser historias distintas con muchos lazos en común en escenarios, mecánicas y personajes, no así la quinta entrega de la saga que la propia Capcom la considera como un título independiente y que se traslada a un futuro mucho más lejano. Aparte también tuvimos una sexta entrega de la saga que nunca llegó a salir fuera de Japón y que se engloba en el terreno de los MMORPG (World of Warcraft) lanzado en Japón en 2016 para PC y que tuvo tan poca repercusión que la propia compañía decidió cerrar los servidores un año más tarde.

Los datos

El primero de los juegos de la saga, Breath of Fire, vio la luz originalmente en 1993 en Japón y 1994 en Estados Unidos en la consola de moda de la época, Super Nintendo, y nunca llegó oficialmente a Europa por ser los JRPG un género aún muy minoritario y que muy pocas compañías se atrevían a publicarlos y/o distribuirlos en el viejo continente. Guarda muchas similitudes gráficas y de mecánicas con los Final Fantasy con la diferencia de contar con unos protagonistas que pueden convertirse en dragones y tener así mucha mayor potencia de ataque. Como decimos, Ryu es el protagonista de todas las entregas, y tiene todo el sentido al venir su traducción de ?dragón? en japonés, y además todos ellos tienen ese nombre por ser descendientes del Clan del Dragón de la Luz, con una fisionomía similar entre sí (pelo azul, fuertes, líderes del clan, protectores y aventureros). La saga completa ha vendido hasta ahora más de 3,2 millones de unidades con sus cinco juegos, incluyendo las remasterizaciones que algunos de ellos han recibido, un número que dista mucho de ser el ideal para el género que es y el éxito que suelen tener, pero que la propia Capcom consideró como un éxito al no haber hecho un gran desembolso en el desarrollo de ninguno de ellos. De hecho, muchos de los assets a nivel gráfico y sonoro eran reutilizaciones de otros juegos de la época.

Actualmente, Capcom tiene abandonada esta saga más allá de de algunas colaboraciones con algunas compañías para utilizar la marca y sus personajes en algunas máquinas recreativas y cosas similares. Debido principalmente al alto coste a la hora de desarrollar juegos de este género y la enorme competencia que existen en el género. Además, en pleno 2022, los JRPG han vuelto a ser un género bastante pequeño en popularidad, no llegando al nicho de los años 80 y 90, y el interés por parte de muchos usuarios se ha visto sustituido por otros géneros más directos como la acción, juegos online y juegos más sociales, lo que lleva a que incluso grandes sagas de este género no suelen cumplir las expectativas de ventas como Final Fantasy VII Remake, juego que ha supuesto pérdidas millonarias para sus responsables por su enorme coste de desarrollo (más de doscientos millones de dólares), motivo por el que muchas compañías como Capcom deciden abandonar el desarrollo de este tipo de juegos, o embarcarse en proyectos de corte similar más independientes (bajo coste y pequeños grupos de personas).

Los juegos

Seis juegos en la saga, más alguna aparición en otras sagas, quedando en cinco como los principales, cuatro continuaciones y uno completamente diferente en su última entrega.

Breath of Fire

Hasta ahora ha aparecido en Super Nintendo y Game Boy Advance en cartucho (este último como remasterización), y en Wii U, 3DS y Switch como juego de la consola virtual.

Este primero se centró en la búsqueda de su protagonista para salvar a su hermana y al mundo del emperador Zog, emperador del Clan del Dragón Oscuro, quien planea liberar a Myria, una diosa de la tentación y la lucha. A nivel de mecánicas de juego, seguía muy de cerca el planteamiento de los Final Fantasy aparecidos en Super Nintendo por aquel entonces, y añadía un sistema de combate por turnos con una perspectiva isométrica (ligeramente diferente de la lateral hasta el momento en otros juegos similares), y un ciclo de día y noche que hacía que pasaran cosas diferentes según el momento del día. A nivel gráfico también seguía muy de cerca los estándares del momento, con bonitos gráficos pixel-art sin demasiadas pretensiones. No tuvo un comienzo demasiado prometedor comparado con los millones de unidades de sagas como Dragon Quest o Final Fantasy, pero ha logrado vender una cifra que ronda entre las cien mil y las ciento cincuenta mil unidades desde su lanzamiento.

Breath of Fire II

También fue lanzado en Super Nintendo, Game Boy Advance, Wii U, New Nintendo 3DS y Switch.
La segunda parte, Breath of Fire II, fue lanzada en Japón un año más tarde del primero, en 1994 (1995 en USA) y nos vuelve a presentar a su protagonista Ryu, diferente del primero pero también descendiente del Clan del Dragón de la Luz, y tiene lugar 500 años después de su primera parte. En esta ocasión, Ryu es un niño que, después de quedarse dormido una mañana, descubre que su familia ha desaparecido y nadie lo reconoce. Tiene que luchar por sobrevivir hasta que un día decide que tiene que ayudar a un amigo Bow, al otro huérfano que se ha metido en problemas, momento en el que comienza su auténtica aventura. Pronto descubrirá el poder que lleva dentro, y su destino se cruzará con el de Nina, una chica con alas... A nivel estético es ligeramente mejor que el primero, aún en 2D y pixel-art, y cuenta con unas mecánicas algo más complejas al permitir unir a diferentes personajes en el sistema de combate para lanzar ataques más poderosos (similar al sistema de Chrono Trigger). Como curiosidad, en el juego estaba una invitada de lujo, Chun Li, que podíamos reclutar para que nos ayudase

Breath of Fire III

Capcom da el salto a las consolas de Sony, primero a PSOne y después a PSP. A finales de los años 90 fue la época en la que muchas compañías japonesas decidieron abandonar a Nintendo por su fuerte política de licencias (control exhaustivo y a un precio muy elevado) además del soporte del cartucho en su consola Nintendo 64. Capcom fue una de ellas y decidió dar el salto a la consola de Sony en 1999 como juego exclusivo para su consola. Volvemos a encarnar a un nuevo Ryu en su paso de niño a adulto. Aquí Ryu averigua desde pequeño que puede transformarse en Dragón, y decide emprender un camino para saber el motivo y conocer también el motivo de la extinción del resto de los dragones. El sistema de combate se hacía más intenso y versátil gracias a la inclusión de maestros que nos enseñaban golpes especiales, y de movimientos y magias que podíamos aprender de los enemigos. En cuanto a ventas, hablamos del BoF más exitoso hasta la fecha, quizás por el gran boom que supuso el lanzamiento de Final Fantasy en todo el mundo dos años antes, momento en el que muchas compañías se lanzaron a publicar sus JRPGs en otros mercados, haciendo que la tercera parte vendiese un número muy superior al medio millón de unidades.

Breath of Fire IV

Lanzado también en PSOne y PSP, así como en PC. Un año más tarde del tercero, en el 2000 (Japón y USA, y un año más tarde en Europa), llega la cuarta entrega, esta vez con la novedad de contar dos protagonistas con historias paralelas (pero que acabarán cruzándose). Así, se nos cuenta el viaje de Ryu para descubrir sus recuerdos perdidos y la búsqueda del Dios-Emperador resucitado Fou-Lu para restaurar su imperio. Se nota mucho el intento de Capcom de hacer un juego algo más serio, y esta entrega se centra en la tensión política entre naciones, la relación entre dioses y humanos, y el proceso por el cual un aspirante a héroe puede convertirse en villano.

A nivel de mecánicas, el juego sigue de cerca la anterior entrega, con un sistema de combate algo más táctico pero por turnos, con las ya típicas transformaciones de sus protagonistas en dragones que los hacen subir de características (en este caso, muchas desbloqueadas desde el principio, siendo intenso desde la primera partida), y un sistema que nos permite llevar en el grupo hasta seis personajes aunque solo tres pueden atacar por turno, pudiendo cambiar en cada turno a los que queramos. También está en 3D con una perspectiva isométrica, y mejora ligeramente la calidad técnica de su anterior entrega en esta consola, con un estilo artístico diferente y con más personalidad. A pesar de todo ello, la compañía no repitió el éxito de la anterior entrega y sus ventas bajaron a unos números similares a su segunda parte.

Breath of Fire: Dragon Quarter

Lanzado exclusivamente en PS2, este Breath of Fire V con el sobrenombre de Dragon Quarter tuvo la eliminación de su número fuera de Japón, específicamente para intentar atraer al público que no había jugado a los anteriores de la saga, y un enorme cambio en cuanto a estética y mecánicas de juego, siendo un juego de estilo Diesel Punk, y también con una temática diferente. Aquí, como si de una versión descafeinada de 1984 se tratase, el mundo superior está prohibido para los humanos, quienes son obligados a vivir bajo tierra formando clases que les asignan tareas para vivir. Volvemos a conocer a Ryu y Nina, y esta vez la tarea está en intentar llevar a Nina a la superficie para que sobreviva con una mejor calidad de aire que la que tiene en los barrios inferiores.

El juego tiene muchos cambios y nuevos sistemas en las mecánicas de juego, especialmente en el sistema de combate, con encuentros no aleatorios y un sistema similar al de los juegos de rol tácticos, ya que el equipo creativo consideraba que los combates hasta la fecha habían sido demasiado fáciles, y querían añadirle más emoción o profundidad. Su recepción fue muy positiva durante los primeros días de venta, pero cayó enormemente tras las primeras semanas, siendo uno de los juegos que menos ha vendido de toda la saga, y probablemente la despedida final - al menos, como RPG tradicional, ya que hay un 6º título concebido como un MMORPG para móviles y PC, que no terminó de funcionar - de una saga que todos esperamos que pueda volver algún día.

Nuevos juegos de la saga

En pleno 2022 vemos complicado que Capcom decida lanzar una nueva entrega de la saga. Como decimos, la producción de un JRPG actual puede hacerse en dos vertientes, siendo la más cara similar a muchos de los actuales como FF7 Remake, y otra más barata similar a juegos como Lost Sphear (bajo coste, estilo indie, etc). Del segundo caso es complicado que veamos algo similar, puesto que la mayoría de compañías prefieren lanzar nuevas sagas para no desvirtuar a las originales, por lo que quedaría la forma de hacerlos con un alto coste. Capcom actualmente no está en una situación como para invertir mucho dinero, con una enorme cantidad de sus grandes creativos que han abandonado sus filas, por lo que tiene que agarrarse a las sagas con más éxito de los últimos años como Resident Evil o Street Fighter. Aún así, no se debe perder la esperanza ante una remasterización de algún título clásico, o incluso un remake para intentar relanzarlos en las consolas más actuales.